El Proyecto CASA- Aravaca clausura el curso con una fiesta en el Centro Cívico
El miércoles 24 de junio, el salón de actos del Centro Cívico de Aravaca se llenaba de gente para asistir a la fiesta de fin de curso del Proyecto CASA. A las 19.00h todos se daban cita: los chicos y chicas, sus familias y amigos, los educadores y otros simpatizantes del proyecto. Tras la bienvenida de la coordinadora, Araceli Avendaño, comenzó el festival. Actuaciones de salsa, canciones, bailes y un espectáculo de Capoeira (actividad que ha desarrollado durante el curso con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid, a través del Instituto de adicciones de Madrid-Salud). Por último se hizo entrega de los Oscar a todos los participantes; una ocasión para agradecer y reconocer con simpatía y buen humor lo que cada uno ha aportado en el proyecto.
La fiesta terminó con una cena compartida, en clave intercultural. Cada familia aportó algo para la cena. Cuantos quisieron participaron de ella. El proyecto era una vez más CASA abierta en la que todos tienen su sitio. El día 1, muchos de los chavales comenzarán el campamento de verano, oportunidad para seguir formándose y compartiendo. Agradecemos desde aquí tanta entrega ilusionada y gratuita de sus educadoras y de los voluntarios que día a día, hacen que el proyecto sea una realidad.
El miércoles 24 de junio, el salón de actos del Centro Cívico de Aravaca se llenaba de gente para asistir a la fiesta de fin de curso del Proyecto CASA. A las 19.00h todos se daban cita: los chicos y chicas, sus familias y amigos, los educadores y otros simpatizantes del proyecto. Tras la bienvenida de la coordinadora, Araceli Avendaño, comenzó el festival. Actuaciones de salsa, canciones, bailes y un espectáculo de Capoeira (actividad que ha desarrollado durante el curso con la colaboración del Ayuntamiento de Madrid, a través del Instituto de adicciones de Madrid-Salud). Por último se hizo entrega de los Oscar a todos los participantes; una ocasión para agradecer y reconocer con simpatía y buen humor lo que cada uno ha aportado en el proyecto.
La fiesta terminó con una cena compartida, en clave intercultural. Cada familia aportó algo para la cena. Cuantos quisieron participaron de ella. El proyecto era una vez más CASA abierta en la que todos tienen su sitio. El día 1, muchos de los chavales comenzarán el campamento de verano, oportunidad para seguir formándose y compartiendo. Agradecemos desde aquí tanta entrega ilusionada y gratuita de sus educadoras y de los voluntarios que día a día, hacen que el proyecto sea una realidad.
